Está claro que muchas veces consumimos más energía de la que necesitamos y que eso repercute claramente en nuestras facturas de luz y agua. Pero no hay que agobiarse, ahorrar un poco es muy fácil y sencillo. Desde Onenodde te ofrecemos cinco sencillos trucos que te permitirán ahorrar un dinero y que son muy fáciles de aplicar:
- No derroches agua cocinando.
Puede parecer algo muy simple, pero es posible que nunca te lo hayas planteado. Te pongo un ejemplo: vas a hacerte unos espaguetis y llenas la cacerola entera. ¿De qué te sirve esto? Sólo conseguirás que el tiempo para que se caliente sea mayor. Si tenemos en cuenta lo que afirman los expertos de Energy Saving Trust, una asesoría de eficiencia energética, llenando la cacerola al máximo estás perdiendo 9 euros al año como mínimo, por algo tan absurdo. Es preferible pararse un poco y usar las cantidades correctas de agua y de alimentos, en función claro está, de lo que consumas en casa.
- No hace falta que te hornees como un bizcocho, poniendo la calefacción a una temperatura moderada tampoco pasarás frío.
Según afirman varios expertos, la temperatura ideal a que debes regular tu termostato es de 18 grados centígrados. Estos mismos expertos afirman, que por cada grado que se disminuye, se puede llegar a ahorrar hasta 100 euros. Lógicamente, no es cuestión de pasar frío poniéndola a muy baja temperatura, pero sí de llevar un cierto control para que tampoco se dispare.
- Ducharse es la clave, bañarse es un derroche.
Pese a que en la mayoría de nuestros hogares dispongamos de una bonita bañera, en realidad, es mucho más eficiente ducharse, según afirma James Burton, de “The Daily Mail”. Este hombre sostiene que se puede llegar a ahorrar hasta 26 euros en gas y 33 en la factura del agua (teniendo en cuenta que se refiere a los precios ingleses). Eso sí, para exista ahorro no puedes tardar en ducharte más de 10 minutos, porque si no puede que gastes incluso más. Lo que está claro es que si la mayoría de las veces te duchas rápido, ahorras tiempo y algo de dinero, aunque de vez en cuando te relajes dándote un buen baño.
- Usa cabezales de ducha de bajo consumo.
Mucha gente desconoce la cantidad de agua que se puede gastar cuando usas alcachofas de ducha con mucha potencia. Y es que si la potencia con la que sale el chorro es excesiva, entonces puede suceder que aunque nos duchemos en poco tiempo consumamos tanta o más agua que si nos diéramos un buen baño rebosante de agua. La clave está es preguntar en la ferretería por las alcachofas de bajo consumo o “alcachofas ecológicas”. Con ellas puedes llegar a ahorrar hasta 8 céntimos por cada ducha, que puede llegar suponer más de 25 euros de ahorro al año. Eso sí, son un poco más caras, pero merecen la pena.
- No olvides usar la tapa de las cacerolas.
Si cubres la olla con su correspondiente tapa, vas a hacer que el calor se mantenga a mayor temperatura y se tarde menos en cocinar la comida. Si tardas menos, consumirás menso energía. Sin embargo, este truco sólo funciona en el caso de que uses una placa de inducción eléctrica, porque si no puede que incluso gastes más al tener que gastar más agua caliente después para limpiar la olla.
